¿Y después del CDIAP?

El momento de la baja del CDIAP puede ser un momento difícil para algunas familias por la sensación de dejar un servicio en el que han sido atendidos desde el inicio de las primeras preocupaciones por el desarrollo de sus hijos.

Es importante tener en cuenta que el CDIAP tiene su papel fundamental en los primeros 3 años de vida, ya que es el período en el que las dificultades empiezan a expresarse y la plasticidad del sistema nervioso es máxima. El diagnóstico e intervención precoz requieren un servicio que pueda dar una respuesta rápida, así como integrar todas las especialidades clínicas vinculadas al neurodesarrollo. En esta etapa, es importante poder atender a los niños ya sus familias de forma especializada, global y precoz.

A medida que el niño se va haciendo mayor también su neurodesarrollo se va especializando y su entorno se va ampliando, en especial cuando inicia su proceso educativo con la entrada en la escuela. A partir de ese momento, nuevos servicios y recursos se ponen en marcha para todos aquellos niños que presentan necesidades educativas específicas.
 

¿Cuáles son los recursos posibles?

¿Qué debería preocuparme en un futuro y qué puedo hacer?

¿Cómo se ponen en marcha estos nuevos recursos?

Durante el período de atención al CDIAP, los profesionales establecen canales de coordinación con los servicios de salud, educativos y sociales para iniciar un trabajo conjunto de apoyo:

  • Servicios de Salud: con el pediatra del niño.
  • Servicios Educativos: a medida que el entorno educativo, a través del Equipo de Asesoramiento y Orientación Psicopedagógica (EAP), va valorando las necesidades e incorporando los diferentes recursos, la respuesta terapéutica del CDIAP se va adaptando y bajando el nivel de intensidad hasta que se da la baja definitiva.
  • Servicios Sociales: a través de Trabajo Social del CDIAP se mantiene coordinación con los distintos dispositivos de servicios sociales. En los casos en que se valore necesario, se realizan las derivaciones específicas tanto durante el período de atención en el CDIAP como en el momento de la baja.

¿Qué otros profesionales seguimos teniendo de referencia?

Si las familias tienen algún tipo de preocupación, pueden dirigirse a los profesionales referentes de primera línea que ya conocen el proceso de desarrollo de sus hijos y que han mantenido coordinación con el CDIAP antes del proceso de baja. Todos los niños tienen un/a pediatra/a de referencia (bien en su CAP, o bien en la sanidad privada) y un profesional referente en la escuela (Educación - EAP) y, si es necesario, un apoyo de los servicios sociales de base .

Estos profesionales referentes de salud, educación y servicios sociales irán adaptando los recursos a las necesidades cambiantes de cada niño.

Y si hay un seguimiento específico tras la etapa del CDIAP?

Algunos niños pueden necesitar una atención específica más allá del centro educativo; en estos casos, desde el CDIAP se realizará la derivación al centro especializado indicado.