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¿Estoy de parto?

El parto

 

¿Qué pasa durante el parto?

Podemos iniciar el parto porque empezamos a tener contracciones, hemos roto aguas o bien porque nos lo han tenido que provocar por diferentes motivos. Las contracciones son imprescindibles en el parto y permitirán la dilatación del cuello uterino y la expulsión del bebé y la placenta. En las primeras fases del parto suelen ser irregulares pero, a medida que el parto va evolucionando, las contracciones son más frecuentes e intensas. Empiezan a la parte superior del útero y finalizan en la parte inferior, duran un minuto aproximadamente y podemos tener entre una y cinco en diez minutos. El tiempo entre contracción y contracción es muy importante que la aprovechamos para relajarnos y cargarnos de energía.

La tolerancia al dolor que provocan las contracciones de parto es particular en cada mujer y, por tanto, disponemos de diferentes métodos para aligerarlo dependiendo de la vivencia que se tenga del proceso.

El parto pasa por diferentes fases, donde el equipo profesional velará por el bienestar físico y emocional tanto de la madre como del bebé.

Fotografías por © Mireia Navarro
  © Mireia Navarro

 

¿Estoy de parto?

 

Pródromos de parto

Es importante reconocer y apreciar las sensaciones y cambios que se producen en nuestro cuerpo y que nos indican que el parto podría desencadenarse en cuestión de horas o días: es lo que conocemos como pródromos de parto. Cada mujer les puede experimentar de manera diferente en su aparición y duración.

Los pródromos de parto son muy variables pero suelen constar de:

  • contracciones uterinas, Que se parecen a las molestias de la regla. Otras mujeres lo experimentan como "pinchazos" en la parte baja del vientre. Se pueden apreciar manualmente como un endurecimiento progresivo del abdomen.
  • Expulsión del tapón mucoso: Es la salida a través de la vagina de una sustancia mucosa, espesa, que puede presentar un color blanquecino, rosado o marrón y que varía en cuanto a cantidad, puede que se expulse de golpe o poco a poco. No siempre se aprecia este proceso, y cuando pasa puede durar horas o incluso días. No es motivo para ir al hospital: el parto es cercano pero no inminente. Es frecuente que la expulsión del tapón mucoso o la rotura de bolsa se acompañen de un leve sangrado, normalmente en forma de hilos de sangre o pequeñas manchas. Es normal y no se debe acudir a urgencias.

Es momento de revisar si tiene preparado todo lo que se necesitará durante su estancia en la maternidad. (Véase Canastilla para el ingreso en el Hospital >>>).

También es importante que lleve todas las pruebas y analíticas realizadas durante el embarazo cuando acudimos a urgencias.

¿Como empieza el parto?

Consideramos que el parto comienza, de manera espontánea, cuando las contracciones se vuelven regulares, Van creciendo en intensidad (quiere decir que se van notando cada vez más fortes), Duran más tiempo y no ceden con el reposo. Puede suceder que simultáneamente rompas la bolsa de las aguas. Es importante la hora en que notas la salida del líquido y su color ya que serán datos que te preguntarán cuando llegues a urgencias. En otras ocasiones, se puede romper la bolsa de las aguas de manera espontánea sin que todavía se hayan iniciado las contracciones de parto.


¿He "roto aguas"?

La rotura de la bolsa, o "de aguas", es la salida de líquido amniótico por la vagina, independientemente de la cantidad o frecuencia.

Puede ser de manera franca (expulsas una gran cantidad de líquido) o alta (la salida de líquido es gradual y se puede confundir con flujo). En caso de duda, se debe acudir al hospital para confirmar o descartar la rotura de la bolsa.

Si el color de las aguas es amarillo, verdoso o muy oscuro debes acudir inmediatamente al hospital. Si el líquido es claro debes acudir pero sin prisa.

En cualquier caso, a las 12 horas de la rotura de la bolsa de las aguas iniciará tratamiento antibiótico para disminuir el riesgo de infección del bebé.
 






Signos de alarma (SIEMPRE se debe acudir a urgencias)

  • Sangrado abundante en cantidad similar o superior a una menstruación.
  • Pérdida de líquido amniótico que no es claro (amarillo, verde, oscuro).
  • Rotura de la bolsa de las aguas de más de 12 horas.
  • Ausencia de movimientos fetales.
  • Fiebre alta de más de 38 ºC.